SEM significa Search Engine Marketing y en un principio este término se utilizó para englobar tanto el SEO como las actividades pagadas (PPC = pay-per-click). Con el tiempo SEM se empezó a utilizar para referirse únicamente a las búsquedas de paga. Y bueno, la famosa herramienta de Google Ads, es la que se usa para comprar estos anuncios.
¿Y cómo los podemos diferenciar?
Muy fácil, en los buscadores, los anuncios patrocinados o de pago se muestran bajo una etiqueta «anuncio», enlaces patrocinados o similar.
Para los resultados orgánicos de SEO no existe ninguna etiqueta y suelen mostrarse inmediatamente después de los primeros enlaces patrocinados.
Ambas estrategias son importantes:
➡️ Lo ideal es tener tu sitio bien optimizado antes de invertir en anuncios, porque si no carga rápido, no es mobile friendly y/o el usuario no entiende la información que muestras, vas a tirar el dinero por la ventana.
➡️ Revisa tu situación actual. Enlista y clasifica las palabras clave que quieres posicionar. Si ya estas corriendo campañas en Google Ads, entonces haz un análisis de las palabras que ya se están posicionando de manera orgánica e invierte en anuncios para las palabras que aún no has podido posicionar. Una vez que tu campaña SEO muestre mayores resultados, puedes ir disminuyendo la inversión en SEM.
➡️ Si no estas recibiendo mucho tráfico de alguna palabra de SEO, puedes incrementar el CTR (click-through-rate), incluyéndola en tu pauta de paga.
➡️ Monitorea constantemente los resultados para poder calibrar ambos esfuerzos.
No escojas entre una u otra, no compitas contra ti mismo. Mejor diseña una estrategia combinada SEO y SEM, y obtén resultados de ambos canales. Aprovecha lo mejor de cada una y disfruta de todo el tráfico que vas a recibir! 🤩